La exconsejera para las Regiones, Sandra Ortiz, aseguró que las pruebas que entregó a la Fiscalía son "verificables, claras y concisas", por eso se mostró sorprendida con que el ente acusador haya rechazado la colaboración y puso en tela de juicio las intenciones de la líder de la entidad, Luz Adriana Camargo.

En una extensa entrevista con Semana, afirmó que los fiscales que la entrevistaron quedaron "muy contentos" y que al final "nos dimos un abrazo", por eso "estoy sorprendida porque hablan de amenazas, de chantaje, eso no tiene sentido".

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En su momento, la Fiscalía aseguró que no accedió a un principio de oportunidad con Ortiz en el caso de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) por supuestas amenazas y chantajes a los investigadores de su caso.

"Ahí están las cámaras de la Fiscalía, pueden corroborar en qué momento ellos se han sentido amenazados o chantajeados por mí", dijo Ortiz.

La exfuncionaria del Gobierno Petro señaló que previo al desenlace de las negociaciones, la propia Fiscal Camargo la felicitó por tener como defensor al abogado Oswaldo Medina porque "era una persona que tenía credibilidad y confianza".

Tras esto, Ortiz criticó a la Fiscal General de la Nación, de quien manifestó "no siento garantías con la señora fiscal".

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Por eso solicitó un "fiscal ad hoc, ir a la sala de instrucción de la Corte Suprema de Justicia y entregar la misma información que construimos con la Fiscalía para que allí corroboren las pruebas que aportamos".

Ortiz ya tuvo una diligencia en la Corte Suprema por el caso de la UNGRD, pero insistió que "no tengo confianza" en Camargo y aseguró que se encuentra "vulnerable, sola, abandonada por el Gobierno".

Apuntó que "siente" que la Fiscal General de la Nación quiere proteger a alguien y aunque no aclaró el nombre, dejó entrever que puede ser el magistrado de la Corte Constitucional Vladimir Fernández, cercano al Presidente.

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Sobre la elección Fernández en la Corte con presunta ayuda del Gobierno, subrayó que "claro que tengo pruebas, pero las diré en su momento".

Cerró diciendo que "no me voy a callar" y le pidió a Petro que "proteja a mis hijas".